Gara, cuando sólo llevaba unos días en casa ( I )


Esta es Gara, como podéis ver tenía cara de asustada. En está foto llevaba pocos días en casa. Gara tuvo mucha suerte, ya que mi mujer, Milagros, fue a por un perrito que había en la perrera municipal. Como este ya no estaba allí, quizás porque su dueño fue a recogerlo…

Un voluntario de la Protectora , Jorge, le comentó: “tenemos una cachorra de tres meses, que aunque es muy bonita, nadie la adopta porque se asustaba de las personas y siempre está en un rincón. Cuando alguien va a cogerla, hace por morderle del miedo que tiene. Si quieres te la puedes llevar unos días para que vaya conociendo a las personas”.

Ni que decir tiene que se la llevó. En un principio con la intención de tenerla unos días y después llevarla, pues como era una cachorra muy bonita tenía bastantes posibilidades de ser adoptada. Nuestra intención era coger un perrillo que tuviese pocas posibilidades de ser adoptado, como podía ser uno más mayor.

La sorpresa vino cuando pasaban los días y Gara no avanzaba casi nada: le tenía miedo a la calle, ruidos, personas, etc. Enseguida nos dimos cuenta que no podía volver a la Protectora, ya que sería su perdición, pues empeoraría y sería muy difícil que la adoptasen.

Al ir leyendo y preguntando para informarnos sobre como tratar a una perrilla que tiene miedo, nos fuimos dando cuenta que el problema era mayor de lo que pensábamos, debido a que Gara no había pasado la fase de socialización.

La fase de socialización consiste en que el perrillo este en contacto directo con las personas, la calle, los ruidos, las aglomeraciones, vea de pasar los coches, motos, etc. Esta fase empieza desde la 8ª de vida en adelante. Es decir, que a partir de los dos meses, como muy tarde, el perrillo tiene que tener contacto con la calle, personas...

Si el perro a partir de la 8ª semana está aislado, ya necesitará de unos cuidados especiales. Por ejemplo, una cosa que solíamos hacer mal, es acariciarla y darle cariño cuando tenía miedo de salir a la calle, pasar por delante de las personas, etc. Según los etólogos, al hacer esto, el perro entiende que lo que está haciendo está bien, y por lo tanto, que está bien tener miedo. Nosotros, eso no lo sabiamos, y lo hacíamos al revés, una equivocación que hacía que no avanzará. Lo que se debe hacer, cuando el perrillo le tiene miedo a algo que nos encontramos en la calle, etc., es ignorarlo y seguir adelante como si no pasara nada

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